Estados Unidos: la Suprema Corte anula “Roe vs Wade”

Fuente: FSSPX Actualidad

En una decisión histórica, la Corte Suprema de Estados Unidos revocó la sentencia Roe vs. Wade de 1973 que permitió que el aborto se extendiera por todo el país, impidiendo leyes restrictivas y permitiendo el establecimiento de leyes que autorizaban el aborto hasta las 24 semanas de embarazo.

Con esta decisión, tomada por una mayoría de 6 jueces contra 3, la Corte Suprema puso así fin a casi medio siglo de abortos autorizados por la jurisprudencia en todo el país.

Breve historia sobre la sentencia Roe vs Wade

FSSPX.Actualidad ha dedicado tres artículos a la historia de esta famosa sentencia del Tribunal Supremo de Estados Unidos y al anuncio de la nueva sentencia publicada este viernes 24 de junio de 2022, en la fiesta del Sagrado Corazón de Jesús, lo cual ciertamente no es una coincidencia.

Roe, al anular una ley de Texas contra el delito del aborto, el 22 de mayo de 1973, legalizó el aborto en todo Estados Unidos. En 1992, la sentencia Casey modificó Roe, haciendo que la jurisprudencia fuera aún más permisiva.

En mayo pasado, el periódico Politico filtró el borrador del caso largamente esperado Dobbs vs. Jackson Women's Health Organization, que revelaba la inminente anulación de la jurisprudencia sobre el aborto. Esta revelación provocó un verdadero terremoto, en Estados Unidos y en muchos países, generando una protesta contra la abolición del "derecho" al aborto.

La nueva situación creada por Dobbs

La sentencia Dobbs es la decisión más importante de la Corte Suprema desde Roe. No solo anula esta última, sino también Casey v. Planned Parenthood, que confirmó Roe.

La sentencia aclara que "el aborto es una profunda cuestión moral. La Constitución no prohíbe a los ciudadanos de cada estado regular o prohibir el aborto. Roe y Casey se han arrogado esta autoridad". Por eso, los jueces "decidimos derogar esas sentencias y devolver esa autoridad al pueblo y a sus representantes electos".

La sentencia fue elaborada por el juez Samuel Alito. Los jueces Clarence Thomas, Neil M. Gorsuch, Brett M. Kavanaugh y Amy Coney Barrett la aprobaron. El juez John Roberts dio una opinión concurrente. Los jueces Stephen Breyer, Sonia Sotomayor y Elena Kagan emitieron una opinión contraria.

La decisión no prohíbe ni criminaliza el aborto, ni reconoce el derecho constitucional a la vida del niño por nacer, pero elimina las barreras legales, creadas y aplicadas estrictamente por el poder judicial federal, que desde hace décadas impiden que los estados restrinjan o prohíban severamente la matanza de niños por nacer.

Por lo tanto, marca el comienzo de una nueva era de la política sobre el aborto en Estados Unidos, con el campo de batalla desplazándose ahora a las legislaturas estatales. Estos organismos ahora son libres de discutir y regular el aborto como mejor les parezca.

La decisión es una victoria para la Iglesia católica y el movimiento pro-vida en Estados Unidos, que han trabajado diligentemente para anular la sentencia Roe desde la histórica decisión del 19 de enero de 1973.

Las reacciones episcopales

"Estados Unidos se fundó sobre la verdad de que todos los hombres y mujeres son creados iguales, con derechos otorgados por Dios a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad", dijeron monseñor José H. Gómez, de Los Ángeles, y monseñor William E. Lori, de Baltimore, en una declaración conjunta.

"Esta verdad fue negada gravemente por la sentencia Roe v. Wade de la Corte Suprema, que legalizó y normalizó el asesinato de vidas humanas inocentes", continúan los obispos. "Damos gracias a Dios porque la Corte revocó esta decisión". Monseñor Gómez es presidente de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos (USCCB), y monseñor Lori es presidente del Comité de Actividades Pro-Vida de la USCCB.

"Esta sentencia es el fruto de las oraciones, los sacrificios y la defensa de innumerables estadounidenses de todos los ámbitos. Durante estos largos años, millones de nuestros conciudadanos han trabajado para educar y mostrar la injusticia del aborto; ofrecer atención y asesoría a las mujeres, y trabajar en alternativas al aborto, incluyendo la adopción, la colocación del niño en hogares de acogida y las políticas públicas de apoyo a las familias", continúa el comunicado.

"Compartimos hoy su alegría y les estamos agradecidos. Su trabajo por la causa de la vida refleja todo lo bueno de nuestra democracia, y el movimiento pro-vida merece ser contado entre los grandes movimientos por el cambio social y los derechos civiles en la historia de nuestra nación".

La decisión está en línea con el proyecto filtrado

El resultado del caso Dobbs no fue muy sorprendente, ya que la sentencia final guarda un gran parecido con el borrador redactado por Alito en febrero y filtrado a la prensa el 2 de mayo.

En Roe vs. Wade, el Tribunal dictaminó que los Estados no podían prohibir el aborto antes de la viabilidad, misma que el Tribunal determinó en 24 a 28 semanas de embarazo.

Casi 20 años después, el Tribunal confirmó la sentencia Roe en el caso Planned Parenthood vs. Casey. El fallo de 1992 estableció que, si bien los Estados podían regular los abortos antes de la viabilidad, no podían aplicar una "carga indebida", definida por el Tribunal como "un obstáculo sustancial en el camino de una mujer que busca un aborto de un feto no viable".

La ley sobre la edad gestacional en Mississippi, el tema del caso Dobbs, impugnó directamente ambas sentencias, porque prohíbe el aborto después de las 15 semanas, mucho antes del punto de viabilidad.

"Evidentemente, Roe fue una equivocación desde el principio. Su razonamiento fue excepcionalmente débil y la decisión tuvo consecuencias perjudiciales. Y lejos de lograr un acuerdo nacional sobre el tema del aborto, Roe y Casey han inflamado el debate y profundizado la división", declara el texto. 

No hace falta describir las reacciones de júbilo de los pro-vida, ni los vituperios de los pro-aborto quienes claman por la revocación del "derecho" al aborto - un derecho que nunca existió, dicho sea de paso. Joe Biden se distinguió particularmente al afirmar que "la salud y la vida de las mujeres están en peligro".

Lo cual es una falsedad que revela que el presidente de Estados Unidos no sabe nada sobre el sistema de salud de su país, o considera que los médicos estadounidenses son particularmente incompetentes.

Las leyes "gatillo"

En varios estados, como Missouri y Dakota del Sur, las leyes que prohíben o restringen severamente el aborto ya están vigentes a través de leyes "gatillo". Estas leyes, ya aprobadas, pero que habrían sido rechazadas por la jurisprudencia establecida por Roe, automáticamente entraron en vigor tan pronto como se eliminó el obstáculo.

Se espera que más de la mitad de los Estados del país implementen leyes restrictivas sobre el aborto.