Estados Unidos: “provida”, la etiqueta que divide a los republicanos

Fuente: FSSPX Actualidad

¿La etiqueta provida, reivindicada como un estandarte por la mayoría de los conservadores, sería perjudicial al Grand Old Party (GOP) hasta el punto de hacerle perder votos en las elecciones? La cuestión ha sido planteada seriamente entre los senadores republicanos.

A principios de septiembre de 2023 se celebró una reunión a puerta cerrada en el Capitolio. El jefe de los republicanos del Senado presentó los resultados de una encuesta de opinión confidencial en la que se reveló que el electorado de derecha ya no reacciona como antes a los términos provida o proelección que designan respectivamente a los opositores y partidarios del aborto.

"Lo que más me intriga de los resultados es que proelección y provida son dos términos que significan algo diferente en la mente de las personas que consideran el hecho de ser provida como una posición absoluta contra el aborto en cualquier situación", señaló el senador de Dakota del Norte, Kevin Cramer.

Según Josh Hawley, republicano electo de Missouri, es necesario ser más precisos sobre la cuestión del aborto: "Para muchos votantes, ser provida equivale a excluir cualquier excepción a la regla, mientras que el término proelección se ha vuelto bastante amplio en su significado.

"(Nuestra reunión en el Capitolio) se centró principalmente en la forma en que los votantes perciben estas expresiones y cómo han cambiado sus percepciones. Entonces, en el futuro, si abordamos este tema (del aborto) tendremos que hacerlo de una manera más matizada", añadió.

Este mismo discurso se escucha en labios de Cynthia Lummis: según la senadora de Wyoming, "no podemos quedarnos solo con esta etiqueta, los votantes necesitan que el debate profundice en este tema. Lo que entendimos, es que como funcionarios electos debemos "arriesgarnos" y decirle a la gente exactamente nuestras posturas sobre el tema del aborto".

Una postura que Kevin Cramer resume así: "Creo que deberíamos decir: soy provida pero también tengo compasión por la madre y el niño, sin embargo, en cualquier caso, después de quince semanas de embarazo, cuando un niño puede experimentar sufrimiento, la vida debe estar absolutamente protegida".

El origen de esta reflexión lanzada por el Partido Republicano en el Capitolio, se basa en los sorprendentes resultados de las elecciones intermedias de 2022, que están muy lejos de lo previsto por los estrategas republicanos, ya que los demócratas han superado todas las proyecciones en este ámbito. 

Estos resultados fueron atribuidos rápidamente por los analistas a una recepción generalmente negativa, por parte del electorado, de la histórica derogación del caso Roe v. Wade por la Corte Suprema de Estados Unidos unas semanas antes.

Una encuesta de opinión a gran escala realizada en junio de 2022 por el Pew Research Center mostró que el 61% de los estadounidenses están actualmente a favor de legalizar el aborto, al menos en la mayoría de los casos. Pero si se toma en cuenta al electorado republicano, la tendencia se invierte, porque el 60% de los encuestados dicen estar en contra del aborto en todos los casos.

El dilema –o más bien el enigma– es el siguiente: o los estrategas republicanos mantienen el rumbo actual y la cuestión de la creciente erosión de su electorado surgirá durante las próximas elecciones; o deciden, por el contrario, suavizar su posición sobre el aborto a riesgo de aislarse de su base.

En todos los casos, el gran ganador de la derecha es Donald Trump, que no ha cambiado ni un ápice en este tema, y ​​que no parece tener intención de hacerlo a un año de las elecciones, que seguramente serán -al menos por el momento- de su hegemonía sobre el Partido Republicano.