“Annus horribilis” para los cristianos de Jerusalén

Fuente: FSSPX Actualidad

El patriarca latino de Jerusalén, Monseñor Pierbattista Pizzabela

El patriarca católico latino de Jerusalén denunció públicamente la actitud del gobierno israelí, acusado de suscitar el odio de los extremistas judíos contra los cristianos de Tierra Santa, cuyas condiciones de vida empeoran con el paso de los meses.

Pierbattista Pizzaballa es un alto prelado conocido por su discreción y moderación. Por tanto, tras su denuncia contra la responsabilidad del actual gobierno israelí en la multiplicación de actos anticristianos en Tierra Santa, muchos se mantienen a la expectativa. 

Durante una entrevista realizada por Associated Press el 13 de abril de 2023, el patriarca latino de Jerusalén declaró que la comunidad cristiana de la región se ha enfrentado a un número creciente de ataques desde la llegada al poder del gobierno de "Netanyahu VI", considerado el más derechista en la historia del Estado judío.

"La frecuencia de estos ataques, de estos asaltos, es algo nuevo", señala preocupado monseñor Pizzaballa. En su opinión, los agresores "se sienten protegidos, porque ahora el clima político parece justificar, o al menos condonar, que este tipo de acciones se perpetren contra los cristianos".

Una observación que, según el alto prelado, socava el compromiso de las autoridades de respetar la libertad de culto, un compromiso protegido por la ley desde hace 75 años, cuando se fundó el Estado de Israel.

Pero desde entonces, las aguas del Jordán han corrido: el gobierno formado el 29 de diciembre de 2022 por el primer ministro Benjamin Netanyahu tiene entre sus miembros varias personalidades sulfurosas como el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, con incontables cargos penales presentados en su contra desde 2007 por incitación al odio antiárabe y su apoyo a grupos judíos extremistas.

"Las milicias derechistas están ahí para judaizar la Ciudad Vieja y las otras tierras, y creemos que ahora no hay nada que las detenga", lamentó el reverendo Don Binder, ministro anglicano en la Ciudad Vieja, quien precisó que son los "lugares cristianos de culto los que se han convertido en el objetivo principal de los fundamentalistas".

Hay aproximadamente 15,000 cristianos todavía presentes en Jerusalén, la mayoría de los cuales son palestinos; antes de la Guerra de los Seis Días, en 1967, eran 27,000. Y las perspectivas para 2023 están lejos de ser prometedoras: según Yusef Daher de Inter-Church Center, una asociación que registra los actos de discriminación religiosa, el año en curso podría ser el peor para los cristianos en más de diez años.

"Las agresiones físicas y el acoso contra el clero a menudo no se denuncian", señala Yusef Daher, quien ha registrado al menos siete casos graves de vandalismo en propiedades de la Iglesia de enero a marzo de 2023, un fuerte aumento en comparación con los seis casos similares registrados en todo 2022.

Por no hablar del proyecto de transformación del Monte de los Olivos en un parque nacional: un verdadero "expolio" a los ojos de monseñor Pizzaballa. Un proyecto que el primer ministro ha prometido bloquear (pero ¿se puede confiar en su palabra?) movido por la enérgica oposición de los evangélicos estadounidenses que tradicionalmente son uno de los más firmes defensores del Estado de Israel en el extranjero.

Pero, sea como sea, "el actual recrudecimiento de la situación corre el riesgo de generar más violencia y establecer una situación que será muy difícil de cambiar", advirtió el patriarca latino de Jerusalén.